La evolución del Joker en el cine (Creación)

Teniendo así un villano con una patología que encierra diferentes diagnósticos psiquiátricos y psicológicos como: Dependencia emocional (Primero hacia su madre después hacia el reconocimiento de los demás) trastorno de personalidad por ansiedad, trastorno obsesivo compulsivo, inhibición emocional (el retraso emocional de su madurez), trastorno esquizoide de la personalidad (no diferencia entre su realidad y su propios pensamientos. Se combinan ambas formando fantasías idealistas que distorsionan su propia realidad), trastorno psicoide de la personalidad (indiferencia a las relaciones sociales y una afectividad muy limitada), trastorno antisocial y egocéntrico, infantilismo, trastorno de alimentación (por ello su complexión física) y sadomasoquismo.

Todo este diagnóstico clínico se va presentando en las etapas de su vida y en la evolución de la cinta, pues al inicio vemos a un Arthur Fleck con algunos mínimos inconvenientes, que solo quiere llegar a ser un buen comediante, aunque en realidad no se siente a gusto con su toque humorístico más bien complacido con la admiración que puedan a llegar a tener los demás.

Pero internamente vemos que este personaje lleva dentro una represión de emociones, de miedo, ira, intimidad, ansiedad y negación. Que no lo dejan salir de esa burbuja que a toda costa necesita reventar. Es así que más adelante con los nuevos eventos ocurridos, como la confesión de su madre, el entorno hostil que se fue tras él con sus abusos lo llevan a exteriorizar su ira contra el mundo, sintiéndose liberado y sin carga. Como alguien empoderado asesinando a los 2 chicos y de una forma física al tener sexo.

Lo que nos lleva afirmar que la evolución del Joker es continua. Encontrando rasgos sociópatas con alteraciones emocionales ante acontecimientos de estrés y ansiedad. De ahí ese impulso nervioso de risa incontrolable por daños neurológicos. Llamado El afecto pseudobulbar (ASB), psicopatía epileptoide ó Epilepsia Gelástica, una condición neurológica cuya principal característica clínica son accesos de risa o llanto desproporcionados e inapropiados. Es de esta forma que Joaquín Phoenix saca provecho de esa sonrisa clave de un Joker, forjando la risa de forma realista lo mas cercano a una patología clínica real.

Teniendo con todo ello a un una figura marxista a través del relato, un sociópata con un trastorno narcisista de la personalidad.

En esta versión del Joker vemos a un gángster moderno con dientes plateados y un lado perverso más filosófico. Con una personalidad seductora despiadada, donde este villano no tiene el uso total de su conciencia.

En cuanto al interpretación del Joker por parte de Jared Leto, se dice que es la peor y todo radica a que este actor descuido la personalidad del Joker por preocuparse por reflejar la locura de éste mediante manierismos obvios y gestos insoportables, dejando atrás lo más importante el rasgo que lo iba a identificar como el verdadero príncipe del mal. Siendo mas bien una parodia burda del payaso. En donde se limita solo a las poses, a la gesticulación estratégica para lucimiento que en la más importante su trastorno mental.

Teniendo así a un Joker Maníaco retorcido que se basa en la absoluta ausencia de reglas, conductas y normas que puedan interferir o frenar su locura. En donde nada para él está prohibido y todo está permitido en la retorcida mente de este bufón del crimen que amenaza cada vez más a la ciudad de Gotham.

Sus posibles transformaciones durante la serie para dar con la verdadera creación de este gran villano icónico se intenta dar en 2 versiones para llegar finalmente a la más aceptada por la comunidad del cómic.

Inicialmente este Joker es Jerome, un asesino con una personalidad que insinuaba su transformación en Joker. Un psicópata, asesino demente y criminal, hijo de la encantadora de serpientes Lila Valeska, y del vidente ciego Paul Cicero, también hermano gemelo de Jeremiah Valeska. Pero que en la cuarta temporada da un giro inesperado en donde Jerome es asesinado y desde entonces, su hermano Jeremiah, también interpretado por Monaghan, ha tomado su lugar como la nueva interpretación de la serie del Príncipe Payaso del Crimen.

Encontrando así la parte de la escena que atravesó el Joker en el Cómic la broma macabra y Batman, en donde Bruce y Jeremiah luchan en una barandilla sobre los químicos tóxicos, Jeremiah accidentalmente tropieza y cae en el líquido verde. Luego de ello se vería a Jeremiah hospitalizado, en coma. Su piel está completamente cubierta de quemaduras con un tono blanco y su sonrisa desfigurada. Convirtiéndose en el legendario “príncipe payaso” del crimen. 

Que lo acredita con un premio óscar a Mejor Actor de Reparto, además de otros premios y nominaciones relacionadas. Que hoy por hoy después de su muerte continua en los corazones de la gran audiencia, como uno de los mejores villanos representados en los Cómics.

Un personaje (Joker) que para su transformación le tomó bastante tiempo y dedicación. En donde como primera instancia hace un estudio profundo de las historietas, videojuegos, películas y demás material relacionado con Batman y el Guasón. Estudiando de esta forma el origen de los payasos y todas las interpretaciones previas del Joker como la de Jack Nicholson y Cesar Romero’s, quien fue el primer Joker en televisión. Luego de ello busca su sello en la interpretación la cual debía ser distinta al resto de los actores, buscando así puntos claves para su personaje como la voz, los gestos, y su maquillaje y vestuario.

De esta forma llega a su apariencia, en donde conserva la cicatriz del Joker que se llama La sonrisa de Glasgow (Es un acto de violencia pandillera popular en Escocia e Inglaterra). Para el maquillaje en su rostro se inspiró en algunas pinturas del artista Francis Bacon, compartidas por Nolan a Caglione. De esta forma Heath Ledger con absoluta libertad recrea el maquillaje para lo cual utilizó maquillaje de payaso y otro comprado en una farmacia. De esta manera considera que este personaje debía tener sus manos y ropa manchadas, tal como habría ocurrido si se lo aplicará el mismo.

Para el vestuario se inspira en subculturas como el punk y skinhead. En particular en el cantante Sid Vicious, legendario rockero punk de la banda inglesa Sex Pistols.

Pasando a sus gestos y movimientos se inspira en Alex De Large, el personaje interpretado por Malcolm McDowell en La naranja mecánica (1971). De igual forma notamos la semejanza en algunos de sus gestos y voces del músico Tom Waits, un músico estadounidense de culto, cuyo estilo para cantar, era algo taciturno y bohemio. Para cerrar vemos que el actor se lamía los labios, un tic nervioso que se convirtió en otra característica del villano, que Heath Ledger incorporó muy sabiamente. Lo cual empezó como una forma de mantener el pegamento húmedo y la prótesis en su sitio.

Para llegar a la formación del villano , el actor se sumergió durante seis semanas en un motel para dedicarse por completo a la psicología del personaje. Tratando de buscar así los gestos, la risa, y las voces adecuadas para la estructura antagónica.

Fue tanta su dedicación que él y el espejo, eran uno solo. Todo lo que allí ocurría lo fue narrando en una libreta. Lo llamó Diario del Joker. En donde describía cada una de las sensaciones e ideas que podían servirle para bordar su personaje. En sus páginas pegó numerosas fotografías de terroríficos payasos. Tanto así que el actor habría convertido su casa en Manhattan en una especie de templo dedicado al “joker”.

Luego de ello dota al personaje con una psicología tan profunda, desquiciada de un psicópata, alguien con muy poca consciencia de sus actos. Un absoluto sociópata, un payaso asesino de sangre fría, fuera de control, sin empatía, psicótico, asesino en masa, con motivaciones aprehensibles, un villano con una forma de asesinar inadvertida al no prestarle atención ni consideración a sus víctimas.

Todo ello lo lleva a la construcción de ese gran personaje, que le llevo a provocar insomnio. En donde el gran y recordado Heath Ledger afirmó “Mi cuerpo estaba exhausto, pero mi mente seguía funcionando”, en una entrevista concedida al New York Times.

Un brillante criminal psicópata con tendencias al sadismo y un extraño sentido del humor de intenciones claramente patafísicas, atormentando a gente inocente en donde disfrutaba al ver como quedaban sus víctimas después de ser desfiguradas por él con un toxico que les deformaba la cara al igual que la suya.

la importancia de esta versión del joker caracterizada por Jack Nicholson radica en que este actor marcaría el punto de inflexión en la apariencia y personalidad del Joker en la cultura del cine, haciéndolo más popular que el mismo Batman y otorgándole el título indiscutible de payaso príncipe del crimen. Un payaso macabro, atractivo con la vestimenta purpura y pintoresca muy similar a la del cómic del Joker.